Como vivir una vida cristiana que agrada a Dios

Una vida que agrada a Dios
Tabla de contenido

Cuando el Señor nos llama y nos transforma como cristianos, lo hace para que vivamos agradablemente para con él. Esto significa obedecerle, alabarle y adorarle. No obstante, esto parece ser una idea general y no es muy instructivo en cuanto a las decisiones y hábitos que serán necesario desarrollar para cada cristiano.

En este artículo, trataré de esbozar algunos aspectos que la biblia señala sobre como agradar a Dios en nuestra vida, haciendo referencia a pasajes explícitos sobre el tema y desarrollando cada principio. Espero que con esto el vivir una vida cristiana que agrada a Dios sea más sencillo.

¿Cómo debemos vivir para agradar a Dios?

Agradar a Dios debe ser la vida misma del creyente, esto es nuestro deber como también nos conviene. No podemos tocar, hablar, pensar o actuar de alguna manera en el que Dios se desagrade de nosotros. No obstante, por naturaleza estamos inclinados a desagradar a Dios. Por lo que necesitaremos de un esfuerzo sostenido para lograr este cometido.

Para este fin, vamos a enlistar en este artículo un total de 8 cosas que dice la biblia sobre como agradar a Dios.

1. Viviendo humildemente delante de Él

Dios aborrece los soberbios y los altivos. Por el contrario, se agrada en aquellos que se humillan delante de Él, reconociendo su pecado, bajeza e indignidad (Sal. 51:17). Esto se traduce en una búsqueda continua de su ayuda, perdón y gracia.

El alma humilde se siente insuficiente en sí mismo, y no puede evitar ver su propia maldad, llora por su falta de santidad y ruega a Dios que lo transforme. Si queremos agradar a Dios con nuestra vida, necesitamos mucho de los principios de lamento, reconocimiento y arrepentimiento, que nos retrata el Salmo 51 y otros pasajes de la biblia.

2. Mantenga continuamente la alabanza en su boca

Para Dios es agradable la alabanza, así lo afirma la Escritura (Sal. 69:30-32). De aquí podemos deducir que para agradar a Dios debemos adorarlo y alabarlo continuamente, no importa si cantamos mal o somos malos en música, la alabanza es agradable para Dios.

Siempre he aconsejado a los hermanos en la fe a que sumen alabanzas a su tiempo devocional. Pero no solamente esto, sino que también las mantengan continuamente mientras trabajan u hacen los quehaceres del hogar. Si queremos agradar a Dios ¡Alabemos a Dios!

3. Obedeciendo cada uno de sus mandamientos

Este tal vez es el principio más general de todos los principios contenidos en este artículo. Es simple: para agradar a Dios, obedece a Dios.

Podemos tomar como ejemplo el caso de Saúl. Este tomo muchos animales para entregarlos como sacrificio, cosas que, en teoría, debía agradar a Dios. Pero Samuel lo reprendió y lo corrigió diciéndole que la obediencia es mejor que el sacrificio de todos aquellos animales (1 Sam. 15:22).

Así que lee tu biblia, reconoce con rectitud lo que Dios ordena y ponlo por obra. La Escritura, al menos en sus mandamientos y preceptos, es bastante fácil de comprender, aunque no necesariamente de aplicar.

4. Siguiendo el ejemplo de los verdaderos hombres de Dios

En mi investigación sobre este tema me di cuenta de que uno de los libros que más usa el término “agradar” es el grupo de libros de Reyes y Crónicas. En ambos se hace referencia a los ejemplos de reyes anteriores, siendo estos hombres como David, quienes obedecían y agradaban a Dios (2 Cr. 29:2).

Esto es importante porque a veces se nos olvida que Dios provee de ejemplos para que los imitemos, o, para ser más precisos, para que imitemos a Cristo al imitarlos a ellos. Así como ciertos reyes imitaron a David y agradaron a Dios, de la misma manera nosotros podemos imitar a hombres y mujeres maduros en la fe para agradarle también.

5. Gloriarnos en conocerlo y comprenderlo

En Jeremías 9:24 el Señor afirma que, gloriarnos en comprenderlo y conocerlo, es algo que le agrada. Esto es bastante claro, lo que no parece muy claro es que quiere decir el Señor con gloriarnos en Él.

Esto lo explico con más detalle en este artículo, pero por el momento podemos afirmar que a lo que Dios nos invita es a hacer de su conocimiento el más alto sentido de vida. Hacerlo nuestra prioridad y sentido de felicidad, nuestro tesoro y valor.

6. Seguir el ejemplo de Cristo

Si alguien ha agradado a Dios, ese es Cristo, quien es Dios mismo (Jn. 8:29). Por tanto, es necesario que aprendamos a seguir sus pasos de amor. Esto no es otra cosa que vivir una vida centrada en el evangelio, aplicando el sacrificio de Cristo en el amor al prójimo, rectitud y abnegación.

7. Viviendo, en el contexto de la iglesia, para la paz y la edificación

A Dios le agrada no solamente lo que hacemos personalmente, sino también aquello que hacemos en sociedad, y sobre todo aquello que hacemos en bienestar de la iglesia (nuestros hermanos).

Este es el caso de lo que Pablo plantea a los romanos (Ro. 14:15-19). Allí, el apóstol, trata el asunto de los hermanos que pisoteaban la conciencia de los débiles, sin importarles los que estos sintieran o pensarán. Pablo argumenta que lo principal debe ser el amor, de modo que reine la paz y la edificación entre los hermanos, porque esto agrada a Dios.

Si somos cónsonos con Pablo, y queremos agradar a Dios en todo, necesitaremos procurar la paz y la edificación de nuestra iglesia local, sirviendo a nuestros hermanos y amándolos en conformidad a las Escrituras.

8. Compartiendo con otros lo que tienes

Para terminar, quiero señalar lo que dice Hebreos 13:16 sobre compartir lo que tenemos con otros. En ese texto no dice nada sobre personas necesitadas, aunque posiblemente deberían ser los primeros en nuestra lista. En dado caso, lo que considero que enseña este versículo es que debemos aprender a ser caritativos con nuestras pertenencias, con relación a las demás personas y especialmente con la familia de la fe.

Conclusión

Si debemos quedarnos en una idea general sobre como agradar a Dios, debemos decir que es viviendo conforme a lo que él nos ha ordenado en su Palabra. El asunto es que esto no siempre es muy claro para nosotros y en ocasiones no es tan sencillo aplicarlo a nuestras vidas.

Espero que este breve artículo, que se ha fundamentado en versículos y pasajes explícitos acerca de este tema, te sirva para moldear tu vida de una forma agradable delante de Dios.

¿Podrías añadir alguna otra cosa en la caja de comentarios? Te leo.

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Julio César Guevara

Julio César Guevara

Autor, pastor, teólogo y creador de contenido digital. Este es mi blog. Espero que puedas sentirte cómodo, para así ayudarte y servirte con los dones que Dios me ha dado.